Si estás pensando en adquirir una casa o estás a punto de firmar el contrato, ¡esto te interesa! Y es que, aquí te contamos todo lo que tienes que saber sobre los impuestos por la compra de una vivienda. Toma nota para cuando llegue tu momento.
Impuesto en la compra de una vivienda nueva (IVA)
No es lo mismo comprar una casa nueva que una de segunda mano a la hora de pagar los impuestos. Para la primera opción se deberá pagar el IVA: El comprador le abona el IVA al vendedor y este lo ingreso en la Hacienda Pública. Pero, ¿qué se entiende por vivienda nueva? Pues es aquella que se adquiere directamente al promotor tras su construcción. ¿La cantidad que hay que pagarse? Un 4% para las casas de protección oficial y un 10% las que no tienen ningún tipo de protección oficial (para locales comerciales el IVA sube al 21%).
Impuestos en la compra de una vivienda de segunda mano (ITP)
En el caso de una vivienda de segunda mano, el comprador tiene que pagar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP). La cuantía varía según la Comunidad Autónoma en la que se encuentre la casa pero suele estar entre el 6% y el 10%. En este caso es el comprador el que tiene que ir a Hacienda a ingresar el dinero y deberá hacerlo en un período menor a 30 días desde la firma del contrato.
Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD)
Otro de los impuestos es el de Actos Jurídicos Documentados. Y es que, cada vez que se firma la compra de una vivienda hay que abonar este impuesto sobre la escritura notarial. Se trata de una cuantía pequeña, entre el 0,5% y el 1,5% en función de cada Comunidad Autónoma.
Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI)
El IBI es un tributo municipal anual que tiene como función gravar la titularidad de la vivienda y se paga cada año al ayuntamiento una vez que se es propietario. La cuantía depende según el valor catastral de la propiedad y todo aquel que tiene una vivienda (viva en ella o no) tiene obligación de pagarlo.
Plusvalía municipal
Este es uno de los impuestos más desconocidos. Se trata de un tributo por «revalorización del suelo». Es decir, si el valor del terreno donde está construida la vivienda ha aumentado desde el momento que la adquirió el anterior inquilino, el nuevo propietario deberá pagar la diferencia del porcentaje desde entonces.
Ahora que ya sabes todo esto es un buen momento para comprarse una casa con CHG, ¿no?
