Crear ambientes, potenciar puntos oscuros, aumentar sensaciones y sacar partido a diferentes zonas son algunos de los beneficios y características que la luz crea en nuestro hogar. Por ello, aprender a optimizar sus funciones y calidades son un requisito fundamental para conseguir hacer de tu vivienda el lugar perfecto tanto de día como de noche sabiendo bien cómo iluminar tu casa. Esto teniendo además en cuenta el gasto que suponen y buscando ahorrar en la factura de la luz son los puntos clave que vamos a contarte para que sepas cuáles son las mejores bombillas y hagas una puesta a punto lumínica ¡de lo más rentable!
Ahorrar en la factura de la luz
La temperatura de color en la luz emitida en una bombilla son los grados Kelvin (k). Cuando más grados K tenga una bombilla, más blanca será la luz que emita y cuanto más amarilla y cálida sea, significará que tiene menos K. En función de esto, distinguiremos entre luz cálida, fría y en un termino medio, luz neutra.
Por su parte, la potencia se mide en vatios (W), que es una medida de potencia y no de luminosidad. Es decir, por más W que tenga una bombilla, no significa que vaya a iluminar más.
Finalmente, el lumen es la medida que sirve para cuantificar el flujo luminoso, esto es, la capacidad total de una bombilla para poder iluminar. Y finalmente, el lux es la unidad que mide una cantidad de luz en un punto concreto.
Una vez explicado esto, es conveniente saber que para llegar a ahorrar en la factura de la luz, factores como el tipo de bombilla, su potencia, tamaño y también distribución dentro de casa influirá para gastar más o menos.
Por ello, optimizar la función de la luz en cada rincón de la casa, el uso que se la da a cada estancia y las actividades que se desarollan dentro de ella es fundamental para crear el espacio adecuado con el objetivo de saber cómo iluminar tu casa para ahorrar y optimizar.
Iluminar el dormitorio
Lo normal a la hora de iluminar un dormitorio, es colocar la bombilla en la zona central para iluminar de manera equitativa toda la estancia. Sin embargo, no todas las viviendas tienen por qué tener el punto de luz en el mismo sitio o, por una cuestión estética, prefieres colocar diferentes puntos repartidos en determinadas zonas. Esto, además de dar una mayor luminosidad a la estancia, creará un ambiente más cálido y acogedor pudiendo encender y apagar puntos de luz según convenga.
Si es así, además de colocar bombillas led, puedes optar por que estas sean bombillas inteligentes que se controlen a través de apps para poder usarlas sin necesidad de levantarte de la cama.
Iluminar el cuarto de baño
Otra de las zonas más importantes a tener en cuenta si quieres saber cómo iluminar tu casa de manera óptima es el cuarto de baño. Por su uso y utilidad diaria, todo el espacio debe estar bien iluminado, haciendo especial hincapié a la zona de la bañera o ducha y a la del lavabo. Una de las opciones más inteligentes es colocar un punto de luz extra justo encima del espejo principal con un interruptor de encendido y apagado independiente del de la luz central para no generar un gasto extra si no va a utilizarse la zona de lavabo.
¡Y el salón!
Aparte de la luz natural, cuando vayas a pensar en cómo iluminar tu salón de la mejor manera posible, hay que centrarse en aquellos momentos del día en los que ya no entra luz natural y en las cosas que solemos hacer en él a esas horas. Ver la televisión, leer, trabajar… Una vez hayas dejado definido este concepto, podrás saber cuáles son esas zonas que requieren de una mayor luz artificial ya sea con lamparas de techo, apliques de pared o lamparas de pie. Lo mejor es apostar por colocar luces led en el perímetro del salón para que iluminen todo el conjunto de forma general y luego colocar puntos de luz estratégicos en la zona del comedor, el sillón de lectura e incluso sobre algún cuadro o elemento decorativo especial.